BUTCH CASSIDY AND THE SUNDANCE KID
Este jueves, nuestro amigo Juan Carlos, en su blog ¿Y qué te cuento? nos propone escribir sobre alguna canción que haya tenido algún significado en nuestras vidas. Nunca me había parado a pensarlo pero, la famosa Raindrops Keeps Fallin´ on My Head (gotas de agua siguen cayendo en mi cabeza) que acompañó a la película Dos Hombres y un Destino, (en aquella época y aún ahora, los españoles no éramos capaces de leer su verdadero título, que es el de esta entrada, y hubo que buscar algo más cercano) es todo un alegato en favor de la búsqueda de la libertad.
La amistad entre Butch Cassidy (Paul Newman), Sundance Kid (Robert Redford) y Place (Katherine Ross) así como su amor a la libertad, queda patente en multitud de imágenes del film. Y, como en la vida misma, la libertad acaba por ser doblegada por la ley, en ocasiones injusta.
De las estepas del lejano oeste norteamericano, en el mismísimo estado de Wyoming, hasta el cono sur, pasando por Buenos Aires y acabando sus andanzas en territorio Boliviano (como más tarde el mismísimo Che Guevara), su libertad recorrió el mundo sin conocer fronteras. Estos dos hombres, Butch y Longabauth (Paul Newman y Robert Redford) encontraron su destino final: la muerte.
Place (Katherine Ross), la compañera de ambos pues, en efecto, parece haber un lazo afectivo y amoroso entre los tres protagonistas, fue más previsora y marchó a norteamérica antes de tan fatídico desenlace.
Os dejo el enlace para que lo disfrutéis, y una mera traducción cuya letra te hace pensar. Al menos a mí.
Traducción al español, un tanto simplón:
Gotas de lluvia siguen cayendo en mi cabeza
Y como el hombre cuyos pies son muy grandes para su cama
Nada parece encajar
Esas gotas de lluvia caen en mi cabeza, siguen cayendo
Así que hablé con el sol
Y le dije que no me gustaba la manera en que hacía las cosas
Se quedó dormido en el trabajo
Esas gotas de lluvia caen en mi cabeza, siguen cayendo
Pero hay cosas que sé
La tristeza que esas gotas me hacen sentir, no me vencerán
No pasará mucho tiempo para que la felicidad venga a saludarme
Gotas de lluvia siguen cayendo sobre mi cabeza
Pero eso no significa que mis ojos enrojezcan pronto
El llorar no es para mí
Porque no voy a parar la lluvia quejándome
Porque soy libre
Nada me preocupa
No pasará mucho tiempo para que la felicidad venga a saludarme
Gotas de lluvia siguen cayendo sobre mi cabeza
Pero eso no significa que mis ojos enrojezcan pronto
El llorar no es para mí
Porque no voy a parar la lluvia quejándome
Porque soy libre
Nada me preocupa
No recordaba la película, la vi en el cine, en su tiempo, siendo niño y claro, no se me había grabado en mi banco de recuerdos.
ResponderEliminarAhora la repaso con tu relato y entiendo y disfruto la canción.
Un abrazo.
Es notable como el cine, tanto en la historia como en la musicalización de sus peliculas, nos marca mucho más de lo que pensamos. De repente los recuerdos de un momento especifico surgen sin proponérnoslo ante el incentivo de una melodía
ResponderEliminar=)
Es interesante ver cómo la música se liga a determinadas cosas. En tu caso, apelaste a una película y a lo que ella dejó en tí.
ResponderEliminarMuy buen aporte, que nos sirve para interiorizarnos y conocer más sobre el film, su música y su sentido.
Besos!
Gaby*
Extraordinaria película, con tres geniales actores, todo un canto a la amistad y a la deshinibición; y maravillosa canción que creo recordar que ganó el oscar. Siempre me ha parecido que esta música, con esa melodía a priori desenfadada y sencilla, tiene un trasfondo enormemente evocador que deja un regusto de tristeza y melancolía.
ResponderEliminarUn abrazo
La película la vi hace ya tiempo, no la unía a este tema musical o no lo recordaba. Esta muy bien, que hoy la traigas hasta nosotros.
ResponderEliminarUn abrazo.
Llevas toda la razón al decir que en aquellos tiempos que vimos la película los españolitos no estábamos para sutilezas ni con los idiomas ni con las libertades.
ResponderEliminarTe agradezco, no sabes cuanto, esta entrada.
Un beso y gracias.
No recuerdo haber visto la película o, al menos, no ha dejado huella alguna en mí. Coincido con la verdad un tanto acida que se desprende de la misma, la libertad está bastante enconsetada por la ley, por las reglas, por las normas, por.... por tantas cosas.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo.
Recuerdo vagamente la película y la canción no la asociaba con ella la verdad, pero ambas me traen muy buenos recuerdos de mi infancia, de tardes viendo películas en la tele....
ResponderEliminarUn beso
Maravilloso tema de Burt Bacharach, que silvamos hasta la extenuación. Un clásico con todas las connotaciones del nuevo wester que tanto nos sorprendió. Bien traida y mejor celebrada.
ResponderEliminarAbrazos